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Tócame con tus palabras | “La del 1008”, un cuento de Jorge Malpartida*

El cuento logró una mención honrosa en el primer concurso de relatos eróticos organizado por Literalgia, Ciudad Librera y Las Vibrantes

Ilustración: Fiorella Fiestas / Literalgia

 

La del 1008

Autor: Jorge Malpartida*

 

El video que recibió Braulio en su celular dura apenas treinta segundos. En la grabación se ve a una mujer en ropa de baño contorneándose en la zona de parrillas de la terraza. Mueve sus caderas frente a la cámara al ritmo de un reguetón de moda. Piel canela, tiras de bronceado en los senos y nalgas, y un tatuaje en forma de estrella en el hombro derecho. La cámara está de frente y graba el momento en el que ella suelta su sostén y muestra unas tetas carnosas. Luego, se cubre con las manos. Exprime los pechos mientras muerde sus labios y dice: ¿Quieres ver más? ¿Quieres ver el resto? Y juguetea con el elástico de su tanga.

Hay otro video, de solo diez segundos, que solo corresponde al fragmento en que se apachurra el escote. Esta versión tiene un sello de agua con el enlace a una página web. Haz click aquí.

Braulio, 45 años, la mitad de esos como conserje en el mismo edificio, reproduce los videos un par de veces más. Guarda su celular y se levanta de la recepción para iniciar su ronda por los 16 pisos.

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Informe 017/2023

De mi consideración:

Ante la reciente comunicación de la Junta de Propietarios, respecto a un incidente en la zona de parrillas y posible infracción al manual de cohabitación y áreas comunes, el personal del edificio, representado por mi persona, inició una investigación interna (plazo aproximado de 5 días hábiles). Hasta el momento se han desarrollado las siguientes acciones:

  • Posible identificación de la fémina que aparece en el video del archivo adjunto. Se sospecha que es la inquilina del 1008. Llegada a inicios del verano, edad 25 años, al día en sus cuotas de mantenimiento.
  • Se recabó testimonios de vecinos que habían reportado incidentes relacionados con la investigada:
  1. La vecina del 1403 comenta que, a inicios de enero, encontró a la fémina en la piscina, cito: «en hilo y mostrando el poto frente a una cámara». La propietaria del 1403 estaba en presencia de sus menores hijas y se dio media vuelta para informar lo ocurrido en la recepción.
  2. Los habitantes del 908 (señor y señora de la tercera edad) comunicaron hace tres semanas sobre ruidos molestos en el piso superior. La pareja de jubilados contó que cada tres o cuatro noches, cito, «se oyen golpeteos incesantes en los muros, chirridos de colchones y gemidos inadecuados».
  3. Vecinos de departamentos aledaños han corroborado estas quejas y comentado que los fines de semana estos episodios se multiplican. Como muestra, en el cuaderno de incidencias aparece la siguiente nota del 11 de marzo del presente: «La señorita del 1008 ingresó al edificio con tres varones y una fémina desconocida (indicó ser su prima). Posteriormente, hubo quejas del departamento 1006 por ‘un olor intenso de marihuana a través del ducto’».
  • El personal ha cursado comunicación escrita a la inquilina investigada para recabar su versión y comunicarle las posibles sanciones de corroborarse los hechos mencionados. Aún no se tiene respuesta.

Sin otro particular, me despido cordialmente.

Braulio Andía, supervisor

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En la grabación de la cámara de vigilancia se ve a la mujer salir de la piscina. El agua recorre un cuerpo voluptuoso de piernas firmes. Con una toalla se seca sus cabellos empapados. Después, se echa boca abajo sobre una banca de madera, mira hacia el frente y levanta sus caderas. Empieza a bambolear sus glúteos.

Braulio revisa otro video que circula en redes sociales. Se lo mandó el vecino del 1503. En esta toma no se ve a la mujer de frente, pero en otra filmación que se difunde por fragmentos en TikTok, aparece mucho más cerca, posicionada frente a una cámara y sonriendo mientras sube y baja sus nalgas. El movimiento es constante y el ángulo de la lente permite apreciar cómo la carne suave se desborda de la diminuta ropa de baño. 🔥 El verano me eleva la temperatura 🔥 🔥 😘, dice la descripción del video.

Otra de las cámaras, ubicada dentro del bar de la piscina, muestra la escena desde un ángulo más alejado. Se ve a la mujer echada sobre la banca y, al frente de ella, un celular colocado sobre un trípode. Por unos segundos, en la toma del video aparece un hombre que observa a la mujer desde una esquina. Tiene los pantalones abajo, piernas peludas, pero no se puede identificar su rostro debido a la distancia.

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Informe 18/2023

De mi consideración:

Luego de dos días de pesquisas preliminares, se ha llegado a la conclusión de que la inquilina del 1008 es la mujer que protagoniza los videos materia de esta investigación. Indagaciones con otros vecinos y una búsqueda exhaustiva a través de Internet ha permitido a mi persona dar con el repositorio de estas grabaciones audiovisuales que usan indebidamente las instalaciones del edificio. Se trata de una página de contenido para adultos, cuyo acceso requiere pago de suscripción.

Mediante la presente, hago pedido formal a la Junta para utilizar el fondo de contingencia del edificio para abonar los U$S 8.99 del servicio de la página. Esto con el fin de facilitar la corroboración de las imágenes que han llegado a mi poder y finiquitar el proceso de investigación dentro del plazo manifestado.

Antes de concluir la comunicación, informo que esta tarde nuevamente me apersoné al domicilio de la investigada para entregarle la citación a la reunión de vecinos (programada para este domingo, 16:00 horas, Sala de Usos Múltiples). Se espera que en esa fecha ella pueda dar sus descargos. Al llamar a su puerta, salió a recibirme la inquilina. Adujo que no podía atenderme ya que en ese momento «se encontraba trabajando» y «estaría ocupada al menos una horita más». Mi persona hace notar que tales afirmaciones parecen faltar a la verdad ya que en esos momentos la interlocutora no vestía ropa apropiada para jornada laboral. Iba descalza (uñas perfectamente pintadas) y llevaba una bata ligera, transparente, que hacía entrever que estaba por tomar un baño o una siesta. Asimismo, desde el otro lado de la puerta se escuchó la voz de, al menos, un visitante masculino.

Sin otro particular me despido cordialmente.

Actualización a las 6 p.m.: Posterior a la redacción del cuerpo de este informe, se pudo comprobar en la cámara de seguridad del pasillo que el visitante de la inquilina era el vecino del 1204, quien en otras fechas también ha ingresado al departamento 1008. Se adjunta la grabación en el presente archivo.

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En la cuenta de la usuaria Exxxótica se encuentran 27 videos. En el primero de la lista de reproducción, titulado «Masaje doble pechuga», la mujer sale frente a la cámara con una blusa rosada. La calidad de la imagen es muy alta y permite ver los pliegues de la tela, el rubor en su rostro y el detalle de las pestañas postizas en sus ojos atigrados. Su mano suelta los tres botones del escote y aparecen dos globos con unos pezones oscuros bien parados. Hace rebotar los senos una, dos, tres veces y ríe hacia el lente. «Papi mira lo que tengo para ti». Después, extiende su mano y se unta un aceite con dedicación sobre la piel canela. Se amasa varios segundos con la sustancia brillosa. Mira a la cámara y llama a alguien con su dedo índice. En ese fotograma se ven unas uñas granates, escarchadas y pulidas con esmero. Segundos después, aparece un pene erecto dentro de la toma. No se ve el rostro del hombre, pero se escucha un «ahora me toca, ricura». La mujer sonríe y esconde dentro de sus labios rosados el trozo de carne que late frente a ella. Mueve su lengua sobre la piel, deja salir un hilo de saliva mientras saborea. «¿Qué más tienes para mí?», pregunta el hombre. La mujer sonríe, agarra con sus manos sus tetas lubricadas, abraza con ellas el pene y empieza a sobarlo de arriba hacia abajo.

La secuencia dura más de quince minutos. En los pocos segundos que Braulio despega su vista del cuerpo de la mujer, nota que el mobiliario que aparece en la toma es similar al de la mayoría de los departamentos del edificio.

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Informe 19/2023

De mi consideración:

Envío un resumen de la reunión de vecinos de anoche. Tras hacer un repaso de los puntos de agenda (pedido de cuota extraordinaria para reparar el sistema de aire acondicionado y revisar propuestas de proveedores para dar mantenimiento a la piscina) se trató el tema que es materia de esta investigación.

La presidenta del Comité Disciplinario de Vecinos (departamento 404) hizo un recuento de los incidentes en la zona de parrillas y mostró un fragmento del video en cuestión (ver Informe 17/2023) protagonizado por la inquilina del 1008. Luego, se dio espacio de diez minutos para que recabar la opinión de los vecinos.

La del 1403 reiteró su molestia por la, cito, «vestimenta inapropiada» de la investigada en áreas comunes y espacios “donde sus niños podrían observarla y quedar confundidos”. La señora del 908 comentó que anteanoche se volvieron a escuchar gemidos y «sonidos de tipo amatorio» en el piso superior. El vecino de 1104 indicó que el fin de semana pasado, luego de regresar de una reunión de trabajo, aproximadamente a las 11:45 p. m. encontró a la investigada dentro del ascensor en prendas no adecuadas, cito, «con traje de enfermera demasiado corto y escotado».

Después de lo mencionado, se invitó a la señorita del 1008 a dar sus descargos. Respecto al video expuesto, indicó que no estaba «enterada» de que no se pudiera usar bikini en las áreas comunes. Dijo que las grabaciones eran para uso personal y preguntó, risitas de por medio, cómo es que habían llegado a manos de otros vecinos (esa duda no fue atendida por la presidenta). Respecto a los ruidos molestos en su domicilio, indicó que era posible que se estuviera colando el sonido de la TV. En cuanto al incidente del ascensor, comentó que estaba yendo a recoger el delivery en pijama (de tela delgada por el intenso verano, sabrán comprender, acotó con otra risita). Agregó que la noche en cuestión, el vecino no dejó de mirarla, «de arriba abajo» durante el recorrido en ascensor. La esposa del señor del 1104 levantó la mano para pedir más detalles sobre ese último aspecto (la duda tampoco fue atendida).

Después, la presidenta del comité le comunicó a la del 1008 que, tras las labores indagatorias, se comprobó que ella sí había incurrido en un comportamiento que atentaba contra, cito, «las buenas costumbres y reglas de convivencia». Se le comunicó la sanción a la que se atenía:

  • Ocho meses sin poder usar el área de piscina, pago de S/ 500 de multa y compromiso para que modere su conducta y vestimenta según las características de un edificio familiar.

Sin embargo, el vecino del 1204, que se presentó como abogado civil y amigo cercano de la investigada, hizo notar que ese acápite no estaba precisado en el actual manual de cohabitación. Segundo, indicó que, de aplicarse la sanción, se caería en una «arbitrariedad legal, atentatoria de derechos fundamentales», que fácilmente podría generar una demanda con posterior indemnización. Recordó además que, en esta ola de calor, es inhumano privar a alguien de darse un chapuzón. Hubo murmullos y gestos de aprobación.

Los vecinos del 1503, 1006, 1004, 1101, 1103, 905, 906, 1604, 407 y 303 respaldaron la opinión del vecino del 1204 y pidieron llevar a consulta el castigo. Asimismo, el vecino del 1104 corrigió su intervención y dijo que es posible que el traje de la inquilina no haya sido de enfermera y tampoco era tan corto como había indicado minutos atrás.

Se sometió a voto la sanción propuesta. Fue desestimada por mayoría (21 votos en contra y 4 a favor). Se propuso actualizar el acápite de sanciones en el manual de convivencia, el cual será revisado en la siguiente reunión.

Luego de lo expuesto, se da por concluido el proceso indagatorio y se archiva la queja contra la inquilina del 1008.

Sin otro particular, me despido cordialmente.

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En el video, ella está de espaldas, encima de un hombre desnudo que yace sobre un sillón de cuero. La mujer de piel canela arquea su espalda y mira a la cámara por unos segundos. Luego, se quita el sostén y el hombre sin rostro besa sus senos. La tanga rosada sale volando, la toma se acerca y se ve unas nalgas redondas que se elevan y engullen el pene erecto. Cabalga varias veces y se escucha «ay rico, rico, así presiona, presiona». La toma se aleja, se ven las manos del hombre agarrando el culo sudoroso. La mujer voltea una vez más, aparece un tatuaje en forma de estrella en un hombro. Sus ojos atigrados se fijan en la cámara largo rato, mientras monta gozosa el cuerpo peludo.

Braulio revisa este último video que le llegó al celular. Lo borra. Después, camina hacia el ascensor y marca el botón hacia el piso 10.  En la grabación de la cámara de vigilancia se lo ve avanzar por el pasillo. Toca el timbre del 1008. Le abren y él ingresa. Luego, la puerta se cierra despacito.

 

 

 

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* Jorge Malpartida Tabuchi (Arequipa, 1990). Periodista. Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Nacional de San Agustín. Tiene una Maestría de Escritura Creativa por la PUCP. Autor del libro Patato: el goleador humilde que miraba al frente (2018), crónica sobre el ídolo del FBC Melgar, Eduardo Márquez. Cocreador del podcast de política y humor El Mal Menor. Este 2024 publicó el libro de cuentos Contra toda autoridad, excepto… (Aletheya).

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